La escuela actual no se corresponde con el mundo actual. El mundo es flexible, cambiante y diverso, y la escuela sigue siendo rutinaria, inflexible, descontextualizada y estática. El mundo exige flexibilidad y creatividad para adaptarse a una vida profundamente cambiante, y la escuela asume currículos fijos delimitados desde siglos atrás. Unos jóvenes que vivirán en el Siglo XXI formados con maestros del siglo XX, pero con modelos pedagógicos y currículos del siglo XIX.
En esta dirección resulta indispensable que los maestros asumamos con compromiso la tares de repensar el sentido y la función de la escuela en la época actual. Para ello, ponemos a discusión ocho posibles desafíos de las escuelas en las primeras décadas del siglo que inicia y a las cuales hemos intentado dar respuesta durante las dos últimas decadas de vida en el Instituto Alberto Merani en Bogotá (Colombia), desde la perspectiva de la Pedagogia Dialogante (De Zubiría, 2006 y 2013).
1. Primer Desafío: Privilegiar el desarrollo frente al aprendizaje.
2. Segundo Desafío: Abordar al ser humano en su complejidad(diversidad e integralidad)
3. Tercer Desafío: Priorizar el trabajo en competencias básicas.
4. Cuarto Desafío: Hay que desarrollar mayor diversidad y flexibilidad curricular en la educación básica y media.
5. Quinto Desafío: La formación de individuos más autónomos.
6. Sexto Desafío: Favorecer el interés por el conocer
7. Séptimo Desafío: Favorecer la solidaridad y la diferenciación individual
8. Octavo Desafío: Desarrollar la inteligencia intra e interpersonal.
TOMADO DE: http://www.plandecenal.edu.co/html/1726/articles-327345_recurso_1.pdf
PEDAGOGÍA DIALOGANTE:
¿Por qué la escuela sigue siendo la misma?
Es el gran interrogante que se plantea desde ámbitos diferentes, hoy tenemos familias cambiantes y menos estables, un mundo globalizado lleno de tecnología que ha alejado a las familias y deteriora las relaciones humanas.
La tecnología no es la solución al problema educativo, es reeducar y educar de manera asertiva a los docentes y futuros docentes, que sean lideres de su comunidad, de su entorno en donde cuenten con autonomía y sobre todo con innovación a desarrollar el pensamiento, los niveles de competencias y aprender a conocerse así mismo.
Aportes de la pedagogía dialogante:
Plantea como fin último de la educación, el desarrollo del estudiante (más no del conocimiento) y su propósito central es la interindependencia integral y escalonada de las tres dimensiones del ser humano la dimensión cognitiva o analítica (ligada al pensamiento), la dimensión afectiva (ligada a los sentimientos y a la sociabilidad) y la dimensión de la praxis (actuar mejor). Este proceso debe garantizar la autonomía de cada una de las dimensiones, y a la vez, su interrelación y desarrollo paralelo y continuo.
1. El conocimiento se construye por fuera de la escuela, pero es reconstruida de manera activa e interés estructurado a partir del dialogo pedagógico entre el estudiante.
2. Este modelo reconoce las dimensiones humanas. La primera dimensión esta ligada con el sentimiento. La segunda con el afecto, la sociedad y los sentimientos. La tercera con la praxis y la acción en función del sujeto que siente, piensa y actúa.
PRINCIPALES REPRESENTANTES:
1. JULIÁN DE ZUBIRÍA SAMPER: Ha formulado una nueva teoría pedagógica nutrida en la psicología y pedagogía contemporánea y que otorga un papel esencial a la educación en el desarrollo del ser humano. Según sus originales planteamientos la escuela debería dedicarse al desarrollo y no al aprendizaje; es decir, que la función de la escuela debería consistir en enseñar a pensar, valorar y actuar a los estudiantes y no en aprender múltiples informaciones propias de la escuela tradicional.
2. MARIN: No hay cultura sin seres humanos y no habrá conciencia y pensamiento sin cultura.
3. VIGOSTKY: La educación no solo influye sobre unos y otros procesos del desarrollo, sino que reestructura de la manera más esencial todas las funciones de la conducta.
4. MUGNY Y DOISE: Concluyen que hoy en día es necesario construir una representación social, contextual y temporal.
5. FEUSTEIN: Inteligencia es entonces la capacidad para cambiar, para beneficiarse de la experiencia en su adaptación a nuevas situaciones.
La escuela tradicional hoy no se enmarca dentro del contexto social, económico y político en que vivimos. Esta continua con programas poco flexibles donde el docente es quien tiene el control, la autoridad y la toma de decisiones, que no contribuyen a la actual sociedad en que vivimos con constantes cambios, aun se tiene la ideología de que el estudiante debe ser pasivo, cumplidor y obediente ante las instrucciones dadas en su entorno escolar. Por lo tanto resulta ser antigua en estrategias y modelos adecuados a las necesidades de una sociedad globalizada, que solicita seres más sensibles, autónomos y capaces de desenvolverse ante cualquier situación.
Hoy estamos frente a nuevos retos, en los que se involucra de manera fehaciente nuestro quehacer pedagógico, los niños deben ser considerados como el eje de la educación, en el cual el conocimiento se ha compartido de manera bidireccional y considerablemente significativo. Es por esto que al estudiante se le debe respetar sus intereses, necesidades, motivarlo a indagar a ser mucho más sensible con su entorno, a construir soluciones y resolver problemas de acuerdo a las herramientas dadas desde un aprendizaje eficaz y significativo.
Por lo tanto deberíamos hablar de currículos, metodologías y estrategias más dinámicas y flexibles, en el que se debe aplicar y utilizar las herramientas de comunicación dadas por nuestro mundo globalizado y al alcance de todos. No es educar para obtener conocimiento, es educar para la vida, formando seres integrales con responsabilidad, éticos y sociales. Por consiguiente se requiere que las herramientas ofrecidas desde el aula hagan del estudiante un ser autónomo, competitivo, integral, flexible pero sobre todo analítico y con la posibilidad de generar cambios desde lo individual hasta lo colectivo.
Dado lo anterior la prioridad hoy es contar con modelos pedagógicos más abiertos, innovadores que propicien una sociedad flexible y democrática. En Colombia se está tratando de romper con la brecha enorme entre lo tradicional y lo que nuestros niños, jóvenes necesitan, es decir modelos educativos centrados en orientar a los individuos a un mejor convivir en sociedad, y para ello recurre a pruebas (Saber e Internacionales) para determinar el “grado de competencias” de los estudiantes.
En pocas palabras la escuela debe favorecer ambientes mucho más enriquecedores, con vínculos más estrechos a la familia, al entorno social y a una realidad latente y cambiante, para hacer de este espacio más igualitario, con mejores oportunidades, menos discriminante, en donde se asuma con responsabilidad y amor la práctica de valores, convivencia, tolerancia; es decir, lograr una educación más humanística.
“En suma, educar a nuestros hijos no es “formar un sabio” ni tampoco dejar crecer un “salvaje ignorante”. Educar es crear un perfecto equilibrio entre el individuo como ser que piensa, razona con su propia cabeza y no con la de otros, y el grupo social que lo rodea, en el cual ha nacido y en el cual vivirá: Educar es formar un ser totalmente integrado tanto en el aspecto individual como social” MERANI